No hace falta que estés muy puesto en el mundo de la reprografía para saber que existen diferentes tipos de formato de papel, pero es posible que cuando empiezas a escuchar hablar de nomenclaturas, proporciones o fórmulas numéricas te hagas un buen lío. Normal.
Bien… pues vamos a empezar por el principio. Los formatos que te vas a encontrar en casi cualquier servicio de imprenta y papelería son aquellos tamaños normalizados que se fabrican de manera habitual en la industria del papel: los famosos DIN. Estos estándares sirven para crear un lenguaje común a todos los países y así evitar confusiones. Bueno, más o menos. Te lo contamos a continuación.
Norma ISO 126/DIN 476
En Europa los tipos de formato de papel están marcados por la norma ISO 126/DIN 476. Estas siglas son el acrónimo de International Organization for Standardization (Organización Mundial para la Normalización) y de Deutsches Institut für Normung (Instituto Alemán de Normalización), propulsores de la norma en 1922. ¡Cien añitos el año que viene!
Dentro de esta norma hay tres categorías o series: la serie A, la serie B y la serie C. Todas ellas están configuradas de modo que las medidas de los lados del papel, sean de mayor o menor tamaño, siempre guarden entre ellas la misma proporción.
¿Y cómo se forman los tamaños? Pues es muy sencillo. El pliego original de cada serie se divide, aproximadamente, a la mitad, dando lugar al tamaño inmediatamente inferior. Con ese nuevo pliego resultante el procedimiento sería el mismo para sacar un tamaño inferior. De manera que cada formato es la mitad que el superior y la medida de su lado mayor se corresponde con la del lado menor del formato superior.
NOTA: ¿Incomprensible? Pues vuelve a leerte el párrafo, ¡porque es imposible explicarlo mejor! 😁
Serie A
Si no acabas de visualizarlo, a continuación lo verás claro. Vamos a hablar de las series, comenzando por la DIN-A, así como de los diferentes usos que se le suele dar a cada tipo de formato de papel.
El formato del que parte la serie A es el DIN-A0 (pliego original) y mide 1189×841 mm. A partir de este obtendríamos las siguientes medidas: DIN-A1, DIN-A2, DIN-A3, y así sucesivamente hasta el DIN-A8, con un tamaño de 52×74 mm.
El formato DIN-A0, por su gran tamaño, suele usarse en copisterías para la realización de carteles o trabajos especiales. Los formatos más comunes son el DIN-A3 y el DIN-A4, usados para documentos estándar y cuadernos. Y el DIN-A8, para hacernos una idea, sería el apropiado para pegatinas o tarjetas de visita.
Serie B y serie C
Las series B y C se crearon de manera alternativa a la serie A. La serie B ofrece tamaños intermedios a los de la serie A, es decir, el tamaño B1 (707×1000 mm) se encontraría entre el A0 (841×1189 mm) y el A1 (594×841 mm), el B2 entre el A1 y el A2, y así sucesivamente.
Por su parte, el área de las hojas de la serie C se corresponde a la media geométrica de las áreas de la serie A y la serie B del mismo número. ¿Ein? Ya. Para que resulte más sencillo vamos a poner un ejemplo, un tamaño C1 (648×917 mm) sería mayor que un A1 (594×841 mm) y menor que un B1 (707×1000 mm).
La serie DIN-B es muy utilizada en libros, cartelería y papeles especiales de dibujo. Las medidas de la serie C suelen ser las habituales para sobres, esto es debido a lo que hemos explicado antes: al ser el formato C ligeramente mayor que el A, las hojas y papeles DIN-A entran de manera holgada en un sobre de su misma numeración correspondiente a la serie C.
Otros formatos
Es necesario hacer alusión a uno de los tipos de formato de papel tradicionales europeos en desuso, o casi: el conocido tamaño folio, que puede causar confusión con el DIN-A4. El tamaño folio es ligeramente más grande que el DIN-A4, por ello es común que estas sean las medidas de las fundas y carpetas de plástico utilizadas para guardar papeles DIN-A4 en archivadores.
El Viejo Continente ofrece su propia escala, llena de nombres evocadores: pliego o doble folio, cuartilla, octavilla… Eso sí, con el mismo criterio ISO/DIN, o sea, cada tamaño es la mitad del anterior. Por no hablar de la holandesa, más ancha y más corta que el folio, hoy una auténtica rareza…
Por su parte, Estados Unidos, Canadá y América Latina tienen sus propias normas. En el caso del formato americano se emplean la carta, el oficio, el legal y la media carta; todos comparten la medida de su lado corto (216 mm) y aumenta o disminuye la del lado largo.
Elige el formato idóneo
A partir de ahora te resultará más sencillo saber elegir el formato adecuado para cada trabajo cuando tengas que imprimir. Si necesitas asesoramiento o tienes dudas, puedes ponerte en contacto con nosotros, ¡estaremos encantados de ayudarte!
